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El coste total de propiedad (mejor conocido por su término en inglés Total Cost of Ownership) es conocido entre los emprendedores como la evaluación del costo total en que se incurre al adquirir un sistema de información, aunque este término ya se usa en muchas otras industrias, es esencial cuando se trata de un hospital.
Para evaluar efectivamente el costo total es importante empezar por los costos adicionales, pues bajo la premisa de cualquier compra grande se entiende que habrán gastos de componentes adicionales que también influencian en la decisión del comprador. La idea es tener claros los costos únicos como costos recurrentes y de esta manera evaluar mejor las opciones.
En este sentido un sistema hospitalario en la nube implican menos costos, tanto únicos como adicionales. Cuando se tiene un sistema dentro del mismo hospital se incurre en una variedad de gastos únicos, como implementación y entrenamiento de uso, pero hay múltiples gastos recurrentes como los son las renovaciones de licencia de software, mantenimiento, nómina para personal e infraestructura cuando es necesaria actualizarla.
Esto sin contemplar que muchas veces estas compañías de software, con los años, intentan incurrir en costos adicionales para actualizar el sistema ya implementado.
Cuando se implementa un sistema en la nube no se tiene gastos inesperados, pues es fácil y rápido identificar los gastos. Los gastos únicos como de implementación y personalización son iniciales, fuera de estos solo está la cuota de suscripción, ya sea anual, mensual o lo que indique el contrato.
Es fácil identificar entonces los beneficios de un sistema en la nube cuando este demuestra con facilidad el costo total de propiedad es mucho menor para este tipo de sistemas. Con todos los gastos desplegados se puede ver cómo el retorno de inversión es mucho más alto.
